Sin embargo, en la capital, la manifestación degeneró en un grave enfrentamiento con las fuerzas policiales y ciudadanos a favor del Gobierno cuando los manifestantes intentaron acceder a la Plaza de la Revolución donde se encuentra el Comité Central del Partido Comunista, la sede del Gobierno, el Ministerio del Interior, el Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias y la sede de la mayor parte de los periódicos de tirada nacional. Poco después de las 15:00 hora local, alrededor de 200 personas tomaron el céntrico Parque de La Fraternidad, trasladándose posteriormente frente al Capitolio (sede oficial del Parlamento). Lo está haciendo también con otra noticia que la maldad ha querido esconder: el ciento por ciento de eficacia frente a la gravedad y el fallecimiento que probó la tercera fase de los ensayos clínicos de Abdala (Aplausos y exclamaciones de: “¡Viva!”). “¿De dónde sale ese odio que no caracteriza a los cubanos?
Ahora jugará para el Reading, al que ha llegado como agente libre. Ahora como hubiera aconsejado Fidel se necesita que: “Al valor no le falte inteligencia, ni a la inteligencia valor. Miembros del Comité Editorial de Comunistas conversaron con varios manifestantes que no estaban contra Fidel Castro ni el Socialismo, y sí pedían mejoras de vida. En buena medida esto se debió a que los reclamos de la intelectualidad disidente no responde a las necesidades de las mayorías quienes exigían demandas básicas de mejoras de vida. La medida legal forma parte del procedimiento a seguir hasta que de manera oficial quede demostrada su no participación en hechos violentos ni en la manifestación. Actualmente Frank García no guarda prisión domiciliaria, sino una medida cautelar donde se regula su capacidad de movimiento, limitándose a sus centros laborales y acceso médico. Esta vive justo a menos de 200 metros de donde sucedieron los choques violentos entre los manifestantes y los cuerpos policiales, quienes intentaban impedir el acceso de la protesta a la Plaza de la Revolución. Es necesario tener en cuenta que 4,4 millones de cubanos tienen acceso a las redes sociales desde sus teléfonos celulares.
Las relaciones de distribución garantizan la equidad y crean la fuerza motriz para el desarrollo; implementar el sistema de distribución principalmente de acuerdo con los resultados laborales, la eficiencia económica y, al mismo tiempo, el nivel de aporte de capital y otros recursos y distribución a través del sistema de seguridad social y bienestar social. Esta vez, a diferencia de otros momentos en las revueltas citadinas, no había ideas sino solo ira y odio. Por el momento no se ha informado de otros decesos a raíz de las manifestaciones. Sin embargo, Frank no debe hacer ninguna declaración a las autoridades de sus movimientos diarios. Posteriormente, las autoridades comprobaron la falsedad de esta acusación. Es cierto que la situación financiera está extremadamente tensa por las razones ya conocidas, y las autoridades se han visto obligados a hacer magia para mantener consumos globales mínimos.
Sin embargo, las razones por la cual la economía cubana está en crisis no le importan a la familia trabajadora en el momento de servir la mesa, aún más cuando se deteriora progresivamente la legitimidad política del Gobierno. Sin embargo, aunque esta última variante fue la abrumadoramente mayoritaria, no se puede entender como una masa socialista políticamente consciente, exigiendo más socialismo a la burocracia anquilosada. Las protestas que tuvieron lugar en Cuba el pasado 11 de julio no se pueden entender como un enfrentamiento entre contrarrevolucionarios y comunistas, tal y se ha pretendido hacer ver por parte del Gobierno; ni de pueblo oprimido versus dictadura, como ha insistido la propaganda burguesa; ni clase trabajadora revolucionaria versus burocracia políticamente degenerada. Tampoco se conoce la cantidad de detenidos en el lugar de los hechos, así como las detenciones posteriores vinculadas con las protestas. En las inmediaciones de la Plaza de la Revolución la manifestación fue repelida por fuerzas del orden público y grupos civiles progubernamentales, generándose choques violentos entre ambas partes, los cuales concluyeron en un número indeterminado de arrestos y heridos.
Mientras tenían lugar las protestas en La Habana, hechos similares tuvieron lugar en las ciudades de Bayamo, Manzanillo, Camagüey, Santiago de Cuba, Holguín, entre otras de menor intensidad, las cuales también concluyeron, incluso se iniciaron, de manera violenta. El camarada Frank García Hernández, quien se dirigía a la casa de una amiga, con quien se encontraba desde los inicios de la manifestación, accidentalmente devino en el lugar de los violentos enfrentamientos acontecidos en las cercanías de la Plaza de la Revolución, pero cuando estos ya concluían. Como muestra de ello, entre los participantes de las protestas había una gran cantidad de jóvenes (por el momento es imposible una cifra exacta). La cifra de los heridos por ambos bandos se desconoce. A pesar de que inicialmente, las primeras protestas comenzaron de manera pacífica, casi la totalidad de las manifestaciones terminaron marcadas por la violencia, la cual fue ejercida por ambos bandos. Si bien es cierto que los manifestantes tuvieron apoyo entre parte de los vecinos de las zonas donde transcurrieron los hechos, también un importante sector de la población rechazó y ha rechazado las protestas.